¿Rubias o
morenas? La eterna pregunta. ¿Ojos claros u ojos castaños? ¿Arregladas o
informales? ¿Jennifer Aniston o Angelina Jolie? ¿Blair Waldorf o Serena Van Der
Woodsen? ¿Audrey o Marilyn? A todas respondo con una frase que me dijo mi padre
una vez: ¿por qué elegir?
La clase de glamour y extravagancia
de Audrey/Holly desayunando frente a Tiffanys. La sensualidad de Marilyn
cantando el “Happy birthday” o con su mítico vestido blanco. Naya Rivera
bailando y quitándote el aliento. Carmen Electra corriendo para
salvar al ahogado nº800 incitándote a ir a esa playa TODOS los veranos de tu
vida. Lara Croft y su ajustado traje gris. Julia Roberts en una bañera de la
que no saldrías nunca. El exotismo de Shay Mitchell y la dulzura embargadora de
Dianna Agron. La voz de Adele y la pasión de Lea Michele. La sexualidad
desbordante de Kate Upton. El lunar de Cindy Crawford. Cualquier ángel de
Charlie y las fotografías de Natasha Nicole que me alegran el día. Lena Heady y Piper Perabo besándose en pleno
atasco, Thelma y Louise cogidas de la mano hasta el final, Spashley y la
diversidad del reparto de The L Word.
Me perdería con Scarlett en Tokio en cualquier momento, compraría Dior por una
cita con Natalie Portman y sin duda sería cliente fija del bar coyote. Sin
duda, envidiaré eternamente a Mr. Darcy por haber encontrado a alguien como
Elisabeth Bennet.
Doy gracias a Dios por cada una de
ellas. Lo siento, no puedo evitarlo, mi mente está llena con recuerdos e
imágenes de mujeres. LA chica sonriéndome en una estación de tren, París
compartido con una mujer, las guiris tomando el sol en Tenerife, la cantidad de
clases que pasé robando miradas rápidas a esa chica perfecta, ese perfume que
reconocería en cualquier parte y que me lleva siempre a ti.
Y creo sinceramente que el mundo
sin la sensibilidad y empatía de una mujer no tendría ningún tipo de sentido, o
al menos el mío carecería de la pasión y emoción que me producen, volviéndose
completamente insulso. Por supuesto que a veces somos incomprensibles, que he
tenido más de un quebradero de cabeza por más de una chica… y los que me
quedan. Y al igual que a veces desearía no fumar por esos momentos de despiste en que me acabo quemando, también desearía no
implicarme tanto en las personas que me rodean y especialmente en las figuras
femeninas de mi vida, por todos esos momentos de malentendidos, discusiones,
decepciones y lágrimas. Pero los momentos buenos compensan con creces a los
malos y si hay algo que vale la pena en la vida son ellas. Y más en nuestro
día.
“Elegance is the only beauty that
never fades” Audrey Hepburn
"Las princesas se hicieron para consentirlas; las damas para
respetarlas; y todas las mujeres para amarlas." Marilyn
Monroe.
“Well- behaved women rarely make
history” Laurel Thatcher
“Over the years I have learned that
what it’s important in a dress it’s the woman who is wearing it” Yves Saint Laurent
“So undoubtably addicted to the way
she swayed when she walked, entranced by the quiet tone of her voice
counteracted by the underlying hint of passion burning within her eyes. This
girl was trouble, I was no idiot, but she made me feel like one. I couldn’t get
enough. There would never be enough.” Natasha Nicole
“Cut the ending. Revise the script. The man of her dreams is a girl.” Julie Anne Peters
Pd. Y si hubiera que elegir, he decir que las rubias me aceleran el corazón pero son las morenas las que se quedan con él. Al menos hasta ahora.
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