jueves, 29 de octubre de 2015

Hello

Cuando son las tres de la mañana y todo el mundo duerme, la ciudad respira a la espera de un nuevo día. Hoy tenía que atrasar el reloj y es en esa hora que he ganado cuando más pienso en lo nuestro. Debería estar dormida hace tiempo pero por alguna razón mi corazón ha elegido esta noche para ir a mil por hora y mi cabeza es incapaz de frenarlo.

Me he planteado muchas veces si existirá otra vida paralela en la que supimos hacer las cosas bien, si tendremos en algún sitio otra historia, sin reproches, sin reencuentros descafeinados y despedidas agridulces.

Irónicamente Adele ha sacado “Hello” esta semana; la habré escuchado ya unos quinientas veces y la letra me llega todas y cada una de ellas.

“I’m in California Dreaming about who we used to be”

Y no sé qué me da más miedo, si la posibilidad de levantarme dentro de unos años y que se me pase por la cabeza hacer o coger esa llamada o la posibilidad de que no lleguemos a estar nunca en ese punto. Tal vez dentro de unos años sea tarde, tal vez ya es demasiado tarde.

Ojalá pudiese hablar con la niña que era yo a los seis o siete años, ojalá pudiese explicarle todo lo que le viene por delante en la vida… Pero probablemente no me habría entendido, y aunque así fuera, ¿podría haber frenado algo? ¿O me habría estampado con más fuerza con las cosas? Mi tendencia generalizada al caos me lleva a pensar en lo segundo. De todas formas habría estado bien poder decirle a mi yo más inocente y enano que de todos los amores imposibles que íbamos a coleccionar a lo largo de estos años, tú ibas a ser el más grande de todos.

“They say that time’s supposed to heal you. But I ain’t done much healing”

Probablemente mi versión de entonces se habría reído y se habría ido a jugar al fútbol, así de simples éramos.

Me asusta pensar que un día pueda mirarme al espejo y seamos más semejantes de lo que yo creía, pero sigo aferrándome a la idea de que no sea así, sigo creyendo ser la cruz de todas tus caras.

Lo curioso es que ahora estoy en un sitio completamente nuevo, ya no siento que tu sombra me persiga por las calles haciéndose eco de todo lo que podría haber sido, ya no la veo en los ojos de la gente que me rodea y no noto en el aire el peso de las decepciones… no como antes. Y aun así hoy no he podido evitar escuchar (a esta hora en la que todo está en silencio) esa frase que Adele dice en su canción y que lleva grabada en mi mente desde hace dos días.


“It’s no secret that the both uf us are running out of time”